Resumen
Los hábitos y las rutinas son signo de constancia y regularidad, fundamentales en la vida familiar y escolar, son parte fundamental de los logros alcanzados como elementos madurativos en la educación preescolar, permitiendo así que los niños y niñas que asisten a la escuela logren un mayor elemento adaptativo, mismo que se verá reflejado y hará la diferencia con aquellos niños que no cursen el grado escolar debido a los mitos aún existentes con los padres de familia sobre que el preescolar es “solo juego”, “no es necesario”, “con que cursen sólo tercero es suficiente”, o algunos otros.