Abstract
Plantea la difícil situación que viven los niños encerrados en cuatro paredes, porque los adultos con quienes viven en casa se encuentran muy ocupados o distraídos en los dispositivos móviles, en el trabajo, en los quehaceres o atendiendo prioridades que no son los de dedicar tiempo de calidad a los pequeños que les permitan convivir, jugar y mantener comunicación asertiva. Lo difícil será que un día mencionen “qué difícil fue ser niño”.